Tal vez era solo nuestra sensación, o tal vez no, y era la de todos los espectadores de la pista central, que después de ver un partido tan bestia y memorable como el de la semi entre Marrero-Salazar y Llaguno-Amatriain, con tantísimos golpes y un abanico técnico tan apabullante, el partido entre las gemelas Alayeto y entre Martita y Lucía ha parecido descafeinado y falto de emoción.
La Gemelas venían de ganar un partido sin demasiadas complicaciones contra Nela y Lorena, así que estaban más frescas que Lucía y Marta que tuvieron que remontar un partido que tenían casi perdido contra Victoria y Cata con el desgaste que eso supone.
Aunque eso tampoco es excusa.
Lo cierto es que las gemelas han arrollado en el primer tiempo a Ortega y Sainz, que se han visto bombardeados y bamboleadas por el juego siempre agresivo de las Alayeto. No les salía nada a la catalana y a la madrileña, y Mapi y Majo poco han tenido que hacer para adjudicarse el primer set por 6-2 con mucha facilidad.
El segundo set ha sido algo más competido. Ortega y Sainz se han puesto las pilas y han presentado más batalla, con una Lucía en la izquierda que ha desplegado un gran juego y que ha jugado con agallas e inteligencia, y también con riesgos. Cuando está enchufada, Lucía juega a un altísimo nivel. Ortega jugaba mucho en diagonal con Mapi, aunque de manera poco fructífera, así que se encargaba de preparar los golpes a Lucía para que entrara en el mejor momento y acabara los puntos.
Pero no es suficiente para ganar a Mapi y Majo, muy concentradas siempre y con marchas de más y que ganaron por un 6-4. Las gemelas tienen otro ritmo de bola y están ágiles y rápidas.
Las Alayeto se encuentran en la final contra una Eli y Patty que vienen reventadas de su semifinal, pero que siempre ponen contra las cuerdas a las gemelas a las que ya han ganado una vez en este WPT.
¿Quién ganará esta vez?
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